Discreto amigo es un libro:
¡qué a propósito habla
siempre en lo que quiero yo,
siempre en lo que yo no quiero…!
‘Las Comedias’, de Calderón de la Barca.
Quisiera que mi libro
fuese, como es el cielo por la noche,
todo verdad presente, sin historia.
Que, como él, se diera en cada instante,
todo, con todas sus estrellas; sin
que, niñez, juventud, vejez, quitaran
ni pusieran encanto a su hermosura inmensa.
¡Temblor, relumbre, música
presentes y totales!
¡Temblor, relumbre, música en la frente
-cielo del corazón- del libro puro!
‘Quisiera que mi libro’, de Juan Ramón Jiménez.
El 23 de abril es un día simbólico para la literatura mundial, ya que en este día y en el año 1616 fallecieron personalidades como Cervantes, Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega. Igualmente se conmemora el nacimiento o muerte de otros autores prominentes como Maurice Druon, Haldor K. Laxness, Vladimir Nabokov, Josep Pla y Manuel Mejía Vallejo.
La celebración de este día fue una decisión espontánea tomada en la Conferencia General de la UNESCO que se celebró en París en 1995, para rendir un homenaje universal a los libros y autores.